Por Hiram Marín
Minnesota impuso su ley en casa y derrotó 21-13 a los Indianapolis Colts
Los Minnesota Vikings fueron superiores de principio a fin y línea por línea. Ofensiva y defensiva armaron una victoria 21-13 sobre los Indianapolis Colts, que por el contrario, poco a poco se fueron desmoronando y nunca pudieron emparejarse a su rival, pese a algunos cuantos destellos.
Las fallas en zona roja y de goles de campo fueron la constante para Indianapolis, cuyo único touchdown fue anotado por la defensiva y que padeció de la intermitencia de Joe Flacco, que este domingo no estuvo en su mejor noche.
Sam Darnold demostró nuevamente que para ganar un partido como estos, se debe tener hielo en las venas. El quarterback de los Vikings se sobre puso a dos intercepciones y lo compensó con tres pases para touchdown y 290 yardas, para liderar una victoria contundente.
Justin Jefferson con sus 127 yardas por aire y Aaron Jones con 21 acarreos para 64 yardas fueron los hombres que encontraron las mejores posiciones de campo para su equipo, que poco a poco se apoderó del resultado.
Parecía que todo había sido un espejismo después de la derrota de la semana pasada, pero este domingo por la noche los Vikings ratificaron que son un equipo de verdad y lo más importante: que son un equipo con altas aspiraciones.