Por Hiram Marín
San Francisco venció 30-24 a los Dallas Cowboys, que reaccionaron muy tarde
Una nueva derrota hubiera sido fatal para las aspiraciones de los San Francisco 49ers, que con todo y las múltiples lesiones que han sufrido en la presente temporada, lograron vencer a los Dallas Cowboys 30-24, en un partido en el que los ajustes de la segunda mitad fueron la clave para ganar.
La primera mitad de los 49ers estuvo plagada de errores, dejaron crecer a los Cowboys y estos por poco aprovechan, pero los constantes errores de su quarterback Dak Prescott y las extrañas decisiones tomadas desde la banca por Mike McCarthy fueron mermando el esfuerzo de los de la estrella solitaria.
Los Niners estaban en casa y lo aprovecharon. Brock Purdy además de reivindicarse del desastre de la semana pasada, lideró a los gambusinos gracias a las 260 yardas por aire y 65 por tierra, además de lograr un pase de touchdown y una anotación por la vía terrestre, ambos en momentos clave.
Otro que brilló por parte de la ofensiva californiana fue George Kittle, quien con 6 recepciones generó 128 yardas y un pase de touchdown y pese a la lesión de Jordan Mason, Isaac Guerrendo tomó la estafeta y logró correr para 85 yardas y un TD.
Los 49ers igualaron su marca en 4 ganados y 4 perdidos, mientras que los Cowboys ya aparecen con marca perdedora de 3-4.