Emma Hayes comenzó su etapa al frente de la Selección Femenil de Estados Unidos

Un día, Emma Hayes tendrá tiempo para unas verdaderas vacaciones. El sábado pasado, puso la cereza en el pastel a una carrera épica de 12 años en el Chelsea al liderar el club londinense que construyó desde cero hasta su séptimo título general (y quinto consecutivo) de la Superliga femenina. Luego, el miércoles, voló a la ciudad de Nueva York con un nuevo título en la mano: entrenadora en jefe de la selección nacional femenina de Estados Unidos.

Hayes se está lanzando de cabeza a un nuevo trabajo cuando faltan apenas dos meses para los Juegos Olímpicos de París. Fue contratada oficialmente por US Soccer en noviembre, pero quería terminar la temporada del Chelsea antes de comprometerse por completo. Ahora ese capítulo se ha cerrado, y Hayes, que siempre está dispuesta a afrontar un desafío, afrontará el siguiente: devolver al cuatro veces campeón de la Copa del Mundo, USWNT, su senda ganadora.

"Por supuesto, en un mundo ideal, a todo el mundo le encantaría estar sentado en la playa durante un par de semanas", bromeó Hayes el jueves por la tarde durante una mesa redonda con un pequeño grupo de periodistas en las oficinas de la Liga Nacional de Futbol Femenino en Manhattan. .

"Pero mi perspectiva es muy clara", continuó. "No tienes muchas oportunidades en tu vida de ir a unos Juegos Olímpicos. Así que sólo necesité un día libre el domingo (tuve una fiesta de cumpleaños para 40 personas, la mayoría de ellos niños de seis años) para recordarme que no veo la hora de volver a trabajar".

Esta era una fiesta temática de Star Wars, claro está, y Hayes dijo que Luke Skywalker estaba allí. Ahora hay "más regalos de Star Wars de los que necesito en mi casa", dijo Hayes con una sonrisa.

Después del último partido de Hayes con el Chelsea (una victoria por 6-0 sobre el Manchester United para hacerse con el título de la WSL), dijo a los periodistas que "categóricamente no puedo continuar. No tengo ni una gota más para dar, sea lo que sea". Pero lo que quiso decir con eso es que no podría continuar en la misma capacidad que ha tenido durante tanto tiempo en el Chelsea.